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CASA RURAL JUMACA
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Capacidad desde 5 hasta 20 personas.
Disponemos de 5 habitaciones desde 20 € hasta 20 € / persona y noche (aprox.)
La Casa Rural Jumanca tiene más de un siglo de historia y su estilo arquitectónico sigue respetando el de la comarca, eso sí, se han incorporado nuevos servicios adaptados al mundo en el que vivimos, además de ser completamente accesible para personas con movilidad reducida. Tiene capacidad para hasta para 10 personas, y es una casa de alquiler completo, para grupos de amigos o familiares que quieran pasar unas cómodas y confortables vacaciones en un entorno rural, rodeado por completo de naturaleza y respirando aire puro.
La Casa Rural Jumanca tiene una decoración rústica, las paredes son de piedra tratada, los techos están soportados por vigas de madera en todas las estancias, en los muebles predomina la madera y la forja, con colchas antiguas tejidas a mano, o muebles lacados de madera en blanco, una decoración rústica pero exquisita, antigua pero moderna y minimalista.
Entre sus estancias podrán disfrutar de:
• Tres habitaciones de matrimonio, una de ellas totalmente accesible
• Dos habitaciones dobles con camas individuales
• Dos baños completos, uno totalmente accesible también y todos provistos de ropa blanca, botiquín y secador de pelo
• Cocina totalmente equipada con todos los electrodomésticos y el menaje necesario para pasar unas cómodas vacaciones sin preocuparse por nada
• Salón comedor con televisión, DVD, y equipo de música
• Y por supuesto calefacción en toda la casa
En el exterior también está perfectamente acondicionado para aprovecharlo al máximo los días buenos, dispone de un precioso cenador, un hermoso jardín con barbacoa y muebles de jardín.
Además la casa dispone para mayor comodidad de los pequeños de cuna y trona, dos bicicletas si quieren explorar la zona, diferentes juegos de mesa, y el tradicional juego de la rana. Todo pensado para que también sea un espacio para la diversión y el disfrute.
En cuanto a su entorno, de él sólo se pueden hablar maravillas, su riqueza natural ha dado lugar a mitos y leyendas. Desde el siglo pasado cuenta la leyenda que el maragato es un pueblo que vive bajo la protección del dios Teleno